La juventud es la fortaleza de la iglesia y nos gozamos de ver a Dios obrando en la vida de nuestros jóvenes, que bueno es conocer a Dios en la juventud, porque nos avisora las promesas de una iglesia fuerte, ore por cada uno de estos jóvenes para que Dios los use, y permanezcan fieles a Dios, ya que el mundo siempre intenta absorverlos e incapacitarles para la obra de Dios.
Adelante jóvenes.
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